En la era de la transformación digital, las organizaciones se enfrentan al desafío de adoptar tecnologías avanzadas para mejorar la eficiencia operativa y la productividad.
Contrariamente a la creencia común, la IA no está reservada únicamente para las grandes corporaciones; de hecho, los emprendedores en todos los sectores pueden aprovechar sus ventajas para mejorar la toma de decisiones, automatizar tareas y crear productos y servicios innovadores.
La urgencia de adoptar fuentes de energía alternativas y más limpias nunca ha sido más evidente, y es en este contexto donde la Inteligencia Artificial (IA) en la Industria de la Energía Renovable desempeña un papel crucial.
Las redes neuronales, un modelo matemático inspirado en el cerebro humano, desempeñan un papel fundamental en el ámbito de la inteligencia artificial. Básicamente, estas redes consisten en neuronas artificiales organizadas en capas, cumpliendo roles cruciales en diversas aplicaciones.
La percepción de la Inteligencia Artificial (IA) está cambiando; ya no es considerada una tecnología extraña y desconocida, sino que se integra cada vez más en nuestras vidas de manera natural.
La normativa tiene como objetivo controlar y garantizar la seguridad de los sistemas de inteligencia artificial, así como respetar los derechos fundamentales de los usuarios tanto en el sector público como en el privado.
Se proyecta que para el 2030, aproximadamente el 75% de las empresas europeas habrán adoptado servicios de computación en la nube, macrodatos e inteligencia artificial.
El proyecto, seleccionado por la Agencia Gallega de Innovación, tiene como meta llevar a cabo una digitalización sostenible y será desarrollado por In2AI Intelligence.